3 plantas que quitan el polvo de la casa y la ayudan a mantenerse limpia

Útiles para decorar el hogar, las plantas verdes de interior tienen muchas ventajas. Son eficaces para mantener limpio el aire circundante. Algunas plantas descontaminantes purifican el aire interior, mientras que otras consiguen retener el polvo gracias a su follaje. Echa un vistazo a estas 3 plantas de interior que eliminan el polvo y ayudan a mantener limpio tu hogar.

Algunas plantas de interior tienen propiedades descontaminantes, pero también eliminan el polvo. Su follaje es eficaz para atrapar el polvo en el aire.

¿Cuáles son las 3 plantas que quitan el polvo de la casa?

  • la planta del caucho
árbol del caucho
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Ficus elastica – Fuente: spm

El árbol del caucho, también llamado caucho o ficus elastica, es una planta perenne, de hojas perennes, de la familia de las Moráceas. El caucho es una planta descontaminante que   purifica el aire del formol   , entre otras cosas, colas, pinturas y aislantes. Además, las grandes láminas de goma ayudan   a retener las partículas de polvo en suspensión.  Limpia el follaje con frecuencia con un paño de microfibra húmedo para aumentar la acción de polvo de tu planta.

Para cuidar tu planta, colócala en una habitación luminosa, pero   evita la exposición a la luz solar directa y  prefiere la sombra parcial. Ficus elastica es una planta tropical que ama el calor y la humedad. Necesita una temperatura entre 15 y 25°C y   rociar el follaje con regularidad.  En cuanto al riego,   regar la tierra en cuanto se seque,   pero sin excesos. Preferir agua no calcárea,   a temperatura ambiente.

Si su árbol de caucho está perdiendo sus hojas, podría deberse a falta de luz, riego insuficiente o incluso raíces encharcadas. El árbol del caucho también puede verse atacado por plagas. Si notas   marcas blancas en el follaje,   significa que tu planta ha sido infestada de cochinillas. Si las hojas se vuelven amarillas, significa que la encía ha sido atacada por los ácaros.

  • La planta araña
Planta araña
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La planta araña – Fuente: spm

El clorofito o planta araña es una planta perenne, originaria de Sudáfrica. Esta planta de la familia Agavaceae   es robusta y fácil de cuidar.  Es eficaz para eliminar toxinas domésticas como tolueno, benceno, monóxido de carbono, xileno e incluso formaldehído. Aunque el clorofito no tiene hojas anchas como el caucho, puede atrapar el polvo   con su follaje denso y aglomerado.

La planta araña aprecia la exposición a la sombra parcial. Prefiere suelos neutros, drenados y arcillosos o ricos en humus. En cuanto al riego, la planta araña agradece un suelo ligeramente húmedo. De hecho, el riego excesivo   puede provocar que las raíces se pudran y maten la planta.  Después de cada riego, elimine el agua estancada en el platillo o macetero. Además, prefiera agua de manantial no calcárea y rocíe regularmente el follaje. De hecho, el clorofito necesita humedad. Las puntas de sus hojas   pueden volverse marrones si el aire está seco.

Fertilice su planta durante el período de crecimiento   con un fertilizante líquido y trasplántela   tan pronto como sus raíces superen el tamaño de la maceta.

La planta araña es generalmente resistente, pero puede ser atacada por pulgones, moscas blancas y ácaros. En caso de infestación, simplemente enjuague la planta con agua.

  • Hiedra, la planta de follaje decorativo
Hiedra
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Hiedra – Fuente: spm

La hiedra es una planta perenne de hoja perenne. Su follaje decorativo puede ser rastrero o trepador. Esta cepa resistente y rústica   tolera las heladas y el frío.  Gracias a su acción depurativa, la hiedra elimina las toxinas del aire, como el monóxido de carbono   producido por los aparatos de calefacción.  Además, todas las variedades de hiedra tienen la capacidad de   acumular polvo en suspensión.

Ivy es fácil de cuidar y no necesita muchos cuidados. Se conforma con unos pocos riegos durante su crecimiento y en invierno   no necesita riego.  A Ivy, en cambio, le encanta la humedad. Agregue mantillo al suelo en primavera para mantener el suelo húmedo. Abona tu planta cada 15 días, con un abono líquido,   durante su periodo de crecimiento vegetativo.  Además, recuerde trasplantar las plantas jóvenes todos los años.

Estas plantas verdes de interior fáciles de cuidar no solo purificarán el aire circundante sino que también eliminarán el polvo en el aire.