¿Cómo se mantienen los azulejos brillantes? Aquí tienes la técnica que cambiará tu vida: todas las limpiadoras lo hacen.
Azulejos
Mantener los azulejos limpios puede ser una tarea desalentadora, pero con esta técnica será muy sencillo. Sólo los expertos en limpieza conocen este truco.
Azulejos y limpieza, la combinación perfecta para un hogar limpio y reluciente
A la hora de comprar una casa o reformarla, elegir los azulejos es una de las cosas más importantes. No siempre es prudente confiar exclusivamente en el gusto estético. En primer lugar, los suelos deben ser funcionales, porque el mantenimiento a veces puede resultar muy complicado.
Limpieza de las baldosas
No importa si las baldosas son de hormigón o de mármol, si su superficie es lisa, rugosa o porosa. Todos los tipos comparten el mismo problema: la acumulación de suciedad y polvo.
Aún así te contamos que tener unos azulejos limpios y relucientes puede ser un juego de niños. Existe una técnica que no sólo te permitirá tener una casa con los azulejos relucientes, sino también tener la lechada limpia.
¿Tienes curiosidad por saber de qué estamos hablando? Pocos conocen este método: lo utilizan principalmente las mujeres de la limpieza.
La técnica “mágica” para conseguir suelos brillantes
En una casa, los azulejos suelen ser los que más cuidados necesitan. En ellos se acumula fácilmente la suciedad, sin olvidar las juntas, que a veces se pegan con polvo e incrustaciones.
Limpieza de suelos
Existen muchas técnicas para mantener limpios los azulejos. Los menos experimentados pueden conformarse con un paño húmedo con detergentes especiales, pero para obtener un excelente acabado es necesario utilizar productos no necesariamente químicos sino también naturales.
Por ejemplo, para desengrasar los azulejos, puedes preparar tú mismo una mezcla de amoniaco y agua. La solución creada tendrá un olor fuerte y acre, así que no la respires por mucho tiempo.
Utiliza una esponja, ponte guantes protectores y empieza a limpiar las superficies con el producto que has preparado. Luego séquelo con un paño limpio. Una vez hecho esto, llega el momento de pasar a la fase más delicada: la limpieza de las articulaciones.
Esta es la cruz y bandera de toda familia y sobre todo el dilema de toda mujer: ¿cómo limpiar las articulaciones? Después de todo, se acumula mucha suciedad en las juntas entre las baldosas.
Incluso en este caso, acudimos en su ayuda. Existe una técnica utilizada por las amas de casa que te permitirá tener las articulaciones limpias en tan solo unos minutos. ¿Sabes cómo se hace? Para realizar esta técnica necesitarás agua y mortero en polvo.
Coge un recipiente y pon en él unos 100 ml de agua. Luego agrega 3 cucharadas de mortero en polvo y mezcla la mezcla hasta obtener una solución sólida y casi elástica.
Con esta solución limpia el suelo como si lo estuvieras lavando, asegurándote de que la mezcla creada llegue al interior de las juntas. Una vez hecho esto, lava el suelo normalmente con los productos que utilizas habitualmente: verás que las juntas quedarán blancas y libres de suciedad. ¿Conocías este método?
Pero para limpiar pisos y lechada, existen otros métodos que puede utilizar. ¿Conoce la técnica del periódico, por ejemplo? Coge unas hojas de revistas o periódicos, sumérgelas en una mezcla de agua y amoniaco y empieza a frotarlas sobre los azulejos: se volverán brillantes en un instante.
Otra técnica para limpiar la lechada de los azulejos es crear una solución con vinagre de manzana. Simplemente mezcle medio vaso de agua con medio vaso de vinagre de sidra de manzana y frote la lechada durante 10 minutos.
Transcurrido este tiempo, lave la mezcla usada con agua hirviendo. El bicarbonato de sodio también puede ayudarte a conseguir azulejos limpios y brillantes: añade dos cucharadas a una taza de agua caliente y limpia los azulejos con esta solución. ¡Eso es todo, ya terminaste! ¡Con unos sencillos pasos, tus azulejos y lechada quedarán como nuevos!