Es una sensación maravillosa poder envolver tu rostro en una toalla suave y fragante. Desafortunadamente , los detergentes agresivos y los lavados muy frecuentes pueden endurecer las fibras y con el tiempo ya no se tiene la agradable sensación de suavidad .
En las lavadoras se suele utilizar un suavizante muy sencillo de supermercado . Pero no todo el mundo sabe que los suavizantes se componen de sustancias químicas que forman una especie de película.
Esta película sólo da la sensación de suavidad que será temporal. Sin olvidar que los productos de limpieza industrial contaminan el medio ambiente que nos rodea.
Sin embargo, existen algunos remedios naturales que nos ayudan a suavizar las toallas sin ningún problema ¡incluso sin suavizante !
¡Descubrámoslo juntos!
Vinagre
El remedio casero más conocido y popular de la abuela para limpiar la casa sólo puede ser: ¡ vinagre !
Ya sea blanca o manzana , es un producto económico y de fácil adquisición. Tiene muchas propiedades: es un antical natural , desinfecta y además tiene función suavizante!
Además, no olvidemos que es uno de los productos del hogar más indicados para eliminar los malos olores, incluso en la lavadora.
Quizás te preguntes cómo puedes usarlo para tener toallas suaves y perfumadas . En realidad, bastarían unas cuantas cucharas en el compartimento especial de la lavadora para notar la diferencia.
Además, el vinagre revive los colores , por lo que tus toallas realmente lucirán como nuevas cuando se tiñen.
manzanilla
Si tus toallas son ásperas, necesitan un tratamiento suavizante y algo “relajante”.
¡Lo hiciste bien! ¡ Estamos hablando de manzanilla ! A menudo utilizamos este remedio natural para favorecer las noches dulces y tener un efecto calmante. Pero pocas personas saben que es muy útil para suavizar las toallas de una forma totalmente natural .
Es necesario hervir 1 litro de agua y dejar reposar 1 bolsita de manzanilla , que utilizamos para infusiones.
Una vez que esté listo y completamente frío, viértalo directamente en el recipiente con agua y remoje las toallas limpias pero ásperas.
Déjalas en remojo durante unos quince minutos , exprímelas y extiéndelas fuera del sol directo. ¡Quedarán suaves y envolventes!
bicarbonato
Hay algunas toallas realmente duras que simplemente no parecen querer volverse más suaves. ¡Pero tenemos la solución para ti!
Si las toallas parecen rascarte la cara cada vez que las lavas, toma un recipiente con agua y agrégale una buena cucharada de bicarbonato de sodio . Debes dejarlo todo en remojo durante una noche entera y luego extenderlo después de exprimirlo.
¡El bicarbonato de sodio suaviza las fibras y elimina los malos olores!
Sal
Nunca olvides que la sal es una forma económica y versátil de conseguir toallas súper suaves, incluso sin suavizante .
La sal equilibra la dureza del agua , que muchas veces es calcárea y por tanto es la encargada de endurecer las toallas.
¡Puedes agregar un poco de sal en cada lavado para equilibrar el agua y dejar tus toallas mucho más suaves!
Sal, bicarbonato de sodio y vinagre.
Puedes combinar diferentes remedios naturales para conseguir una mezcla ganadora y tener unas toallas muy suaves incluso sin suavizante.
Siempre necesitarás el famoso barreño de agua tibia en el que puedes echar un vaso de vinagre , 50 gramos de sal fina y 30 gramos de bicarbonato .
Notarás que se produce una reacción donde el bicarbonato de sodio equilibra las propiedades del vinagre.
Remoja las toallas y déjalas en remojo un rato . Una vez que los hayas secado bien, hay un pequeño truco que puedes seguir.
Para “levantar” las fibras de la esponja y devolverle un aspecto suave a nuestra toalla, muchas personas pasan un cepillo suave sobre el tejido , devolviendo la función a las fibras y revitalizándolas.
¡Esto las hace parecer toallas nuevas!
Por supuesto, estos remedios naturales son fantásticos para suavizar las toallas ásperas, pero tenemos muchos más consejos para ti, ¡incluso para la lavadora!
¡Consejos en la lavadora!
Lávalos por separado
Puede parecer algo trivial, pero unas pequeñas precauciones a tomar al lavar en la lavadora pueden marcar la diferencia a la hora de lavar toallas.
Lo ideal sería lavarlos por separado y separar los blancos de los de color . De esta manera no corremos ningún riesgo.
No cargues demasiado la lavadora
A la hora de lavar en la lavadora debemos tener en cuenta la carga a lavar. Muchas veces, por prisa o por aburrimiento, tendemos a llenar toda la cesta, ¡pero no pasa nada !
Porque aunque utilices un suavizante ecológico y no lo hagas tú mismo, hay más posibilidades de que la ropa quede rígida o incluso se arrugue.
Carga en el lugar correcto sin exagerar.
Utilice la temperatura correcta
No todo el mundo sabe que existe la temperatura adecuada para garantizar la suavidad de nuestras toallas. Por supuesto, también es necesario desinfectarlos gracias a las altas temperaturas.
Pero para tener un enfoque ideal a la hora de lavar en la lavadora, debemos preferir un lavado de 60° para toallas blancas y de 40° para toallas de colores .
Para ropa de color y oscura, no puedes usar esta temperatura para decolorar tus toallas.
No demasiado detergente
Recomendamos utilizar productos naturales o ecológicos y respetuosos con el medio ambiente. Además, se debe utilizar la cantidad correcta de detergente para asegurar la suavidad de los paños.
De hecho, los residuos de detergente , junto con la cal, son una de las causas de que las toallas estén ásperas y de que la ropa no sea óptima .
Así que incluso si utilizas detergente o suavizante ya preparado, basta muy poco para notar una mejora.
Usa pelotas de tenis
Al igual que las pelotas de aluminio, las pelotas de tenis son una de las formas alternativas de suavizar la ropa sin detergente.
De hecho, gracias a la acción mecánica de la canasta, las pelotas de tenis en contacto con las toallas tienen un efecto electrostático que las infla y las vuelve mucho más suaves.
Por lo que puede ser una buena alternativa si no cuentas con uno o más de los remedios especificados.
Recuerda que puede resultar muy útil utilizar el secador, que estimula el famoso hinchamiento de las fibras de las toallas, ¡dejándolas muy suaves incluso sin suavizante!
Precaución
Por supuesto, recordamos seguir siempre la etiqueta de lavado para utilizar el método más adecuado.