El limoncillo es una planta muy bonita y aromática con más de un beneficio para el hogar. Por eso, queremos compartirte todos los cuidados que necesita esta especie para que puedas cultivarla en maceta o directamente en tu jardín .
El limoncillo es una planta herbácea perenne procedente de Asia tropical. Crece en forma de arbusto y pertenece a la familia de las gramíneas. Sus hojas son de una textura y silueta especial, de un color verde intenso.
Entre sus beneficios para el hogar encontramos principalmente que, gracias a su rico pero fuerte olor cítrico, es una planta perfecta para repeler mosquitos y otros insectos . Además, el aceite esencial de limoncillo puede servir para aliviar dolores de cabeza y migrañas, sirve como eliminador natural de pulgas para perros y gatos, entre otros usos.
Así que cultivarla en interior es una gran idea, diciendo que también queda muy bonita dentro de casa o en el jardín. Lo mejor es que su cuidado es relativamente sencillo, sólo debes asegurarte de lo siguiente:
Clima
Al ser una planta de origen tropical necesita calor y buena humedad para crecer . Una temperatura en torno a los 25º C es ideal para el limoncillo, aunque puede tolerar un poco menos. Pero eso sí, hay que tener cuidado si vives en una zona con inviernos muy fríos.
Suelo
Lo bueno del limoncillo es que puedes cultivarlo en casi cualquier suelo y tipo de suelo, ya que no es demasiado exigente con el sustrato. Debe ser fértil y mantener un buen drenaje tanto en macetas como en el jardín.
En cualquier caso, es recomendable enriquecer el suelo con sustancia orgánica antes de plantar limoncillo . Una buena capa de abono o humus de alimañas hará el trabajo.
Irrigación
Quizás bajo sus cuidados el riego sea el más complicado o específico a la hora de querer cultivar limoncillo en interior ya que es bastante sensible a la sequía . Como buena especie tropical, ama los ambientes húmedos y no tolera la falta de agua, ya que el hecho de que las raíces se sequen puede resultarle muy perjudicial.
Así que asegúrese de regarlo todos los días, preferiblemente dos veces al día durante la primavera y el verano, y reduzca su patrón de riego en invierno.
Luz de sol
Aunque puede desarrollarse plenamente bajo la luz solar directa, el limoncillo también crece sanamente en semisombra. Sólo necesitas recibir entre seis y ocho horas de sol al día para ser feliz .
En caso de que la cultives en maceta y la tengas como planta de interior, prueba a colocarla cerca de una ventana donde haya suficiente exposición a la luz. Recuerda observarla para saber si recibe demasiado o muy poco sol. Si notas que sus hojas parecen secas, riégala y pásala a sombra o semisombra.
Jarrón y reproducción.
Si vas a cultivar limoncillo en maceta, no olvides hacerlo en una grande ya que es una planta que crece rápidamente y puede alcanzar hasta dos metros de altura. Por eso, también es una buena idea cultivarlo en el jardín.
En cuanto a su reproducción, el limoncillo es muy amigable si utilizas el método de esquejes, ya sea que los consigas con todo y los enraices y los plantes directamente en una maceta o cortes una de sus hojas del tallo que luego debes colocar dentro de una vaso de agua hasta que eche raíces.
Otros tratamientos
De vez en cuando conviene abonar el limoncillo para beneficiar su crecimiento y desarrollo . Y es muy sencillo, sólo prueba a empezar durante la primavera y hasta finales del verano, abonando cada 15 días añadiendo al suelo material orgánico como compost, humus de lombriz o estiércol.