Cómo cultivar un olivo en maceta

En el imaginario colectivo, el olivo es casi siempre un árbol enorme, quizás centenario, plantado en grandes espacios abiertos para que nos dé su preciado fruto, la aceituna, materia prima de la preciada dieta mediterránea.

Sin embargo, existen algunas variedades de olivo que también se pueden plantar en macetas , en espacios reducidos, y que no producen frutos.

El olivo es una planta que se adapta fácilmente al clima y a condiciones extremas , sin embargo no se recomienda plantarlo en lugares demasiado fríos. Precisamente por eso, plantarlo en una maceta que se pueda tener en el interior es una solución ideal.

Antes de empezar, recordemos que el olivo no necesita mucha agua , y que hay que garantizarle a la planta un excelente drenaje.

Es importante elegir el jarrón correcto, y no por una cuestión estética. Puede parecer poca cosa, pero el material de la maceta puede afectar a la salud de nuestra planta.

La mejor opción son las macetas de barro gruesas , ya que favorecen un buen drenaje y se encuentran entre las más efectivas para aislar la planta.

En cuanto al suelo, es necesario elegir uno que sea drenante y ligero . Una excelente opción es elegir una compuesta por mitad de tierra universal y mitad de una mezcla de arena y lapillus.

La planta del olivo no necesita riego frecuente . Esta planta también se adapta perfectamente a condiciones de sequía, así que riégala periódicamente pero sin exagerar.

Cómo germinar semillas de olivo

La semilla de aceituna no es el clásico hueso que queda después de comerlas. Aunque la avellana se puede germinar, los tiempos serían demasiado largos (unos 2 o 3 años).

L’ideale è rompere il guscio del nocciolo e prelevare l’embrione interno. Per farlo consigliamo di usare delle pinze per spezzare longitudinalmente il nocciolo e liberare il seme grasso che si trova al suo interno.

Questa operazione ha bisogno di una cura estrema, per evitare di danneggiare il seme.

Immergi nell’acqua il seme che hai prelevato. Questa operazione servirà ad attivare una serie di processi metabolici essenziali per lo sviluppo del germoglio.

Successivamente puoi mettere il seme nel terriccio e attendere che la piantina si sviluppi. Ci vorranno circa 4-6 settimane prima di vedere una piantina perfettamente formata.