Seguramente habrás notado que la presión del agua que sale de la regadera siempre es menor, quizás atribuyendo el fenómeno a un problema que afecta a toda la casa o condominio.
En realidad, la mayoría de las veces este problema viene provocado por la acumulación de cal entre los orificios del rociador de la ducha . Algunos de estos agujeros incluso acaban completamente taponados, impidiendo que el agua salga.
Afortunadamente, es posible solucionar este problema con algunos trucos caseros que, además de limpiar la superficie del rociador de la ducha , nos permiten destapar los agujeros y volver a tener una presión de agua óptima.
Para limpiar un cabezal de ducha fijo :
- Llena una bolsa de plástico hasta la mitad con vinagre.
- Coloque el cabezal de ducha en la bolsa de plástico y asegúrelo con una brida.
- Deje el cabezal de la ducha en remojo durante la noche.
- A la mañana siguiente, retira la bolsa y frota el cabezal de la ducha con un cepillo de dientes.
- Por último, abre el grifo y deja correr el agua durante unos minutos.
El vinagre es uno de los ingredientes más eficaces para eliminar los residuos minerales que son la principal causa de la obstrucción de los orificios del cabezal de la ducha.
Para limpiar un cabezal de ducha extraíble :
- Sácalo de su lugar y colócalo bajo el chorro de agua, pero boca abajo (los agujeros deben mirar hacia el chorro de agua).
- Enjuague hasta eliminar los residuos superficiales de cal y suciedad.
- Remoja el cabezal de la ducha en un recipiente lleno de vinagre durante la noche.
- Al día siguiente, frota con un cepillo de dientes y luego enjuágalo como se hizo en el punto 1.
Ahora que ya sabes cómo desatascar los orificios del cabezal de la ducha, intenta aplicar este método inmediatamente para volver a tener una presión de agua satisfactoria.