Cómo germinar naranjas en una taza para decorar la casa

La naranja es una de las frutas más deliciosas  tanto para comer como para elaborar bebidas, infusiones, recetas dulces y recetas saladas. Pero  además, su planta es muy bonita, decorativa y llenará tu hogar de un rico aroma.

Esta maravillosa y nutritiva fruta rica en vitamina C, fibra, proteínas y mucho más es muy fácil de plantar y en el  artículo de hoy te contamos el paso a paso para que puedas hacer brotar una naranja en una taza. ¡Manos al suelo!

Cómo hacer brotar una naranja

1- Consigue las semillas

El proceso de conseguir semillas es bastante sencillo y sólo necesitarás una naranja para hacerlo. Puedes utilizar las semillas de una naranja que consumas y seguir dando vida con ese mismo fruto.

Lo más práctico es  quitarles las semillas a las naranjas y colocarlas en un vaso con agua por un rato, luego quitarles la fina película que las recubre  y una vez que las retires estarán listas para ser plantadas.

2- Prepara la taza para colocar las semillas en ella.

El siguiente paso que debes dar para hacer brotar tu naranja en una taza es  preparar el recipiente donde las germinarás y preparar la tierra. La tierra que tendrás que colocar dentro del vasito debe estar aireada y debe estar húmeda.

Lo ideal es  llenar el vaso con esta tierra y empujar con el dedo unos 4-5 cm para que luego puedas colocar allí la semilla del naranjo. Lo mejor es humedecer la tierra antes de colocar la semilla.

3- Germinar la semilla de naranja

Una vez que  hayas preparado las semillas dentro de la tierra en la copa en la que quieres que crezca tu hermoso naranjo, debes cubrirlas con más tierra y humedecer la tierra. El naranjo tarda en germinar y crecer, pero cuando lo haga podrás aprovecharlo al máximo.

Se recomienda regar la taza pequeña cada vez que la veas seca, es posible que tengas que hacerlo cada 2 o 3 días,  dependiendo de la temperatura y la luz donde la coloques. Puedes dejarlo en un lugar con luz directa ya que le sienta muy bien.

Cómo mantener un naranjo

Una vez que tu semilla haya germinado y comience a brotar y generar más tamaño, debes comenzar a cuidar tu naranjo y para ello te contamos  algunas cosas sobre esta genial planta que decorará tu hogar, lo llenará de belleza y rico aroma. .

luz

El naranjo necesita una buena cantidad de luz y si es mejor directa. Lo más práctico es colocarlo cerca de una ventana o en un balcón, terraza o jardín para que esté bien iluminado. Al principio, cuando tu naranjo esté creciendo, necesitarás protegerlo de una fuerte exposición, pero luego necesitará que tenga un buen crecimiento.

temperatura

La temperatura ideal para un naranjo es de 23 a 32 grados centígrados. Es un árbol que aprecia los climas cálidos y templados pero es muy intolerante a las bajas temperaturas. Por ello, es importante cuidarlo por si la temperatura baja de estos grados y realizar algún tipo de protección con plástico.

Riego

Para que el naranjo crezca bien hidratado y sus raíces sean fuertes y grandes hay que regar cada 2 o 3 días, dependiendo de la época del año y las temperaturas. Es práctico que tu terreno se mantenga hidratado pero nunca encharcado  porque el exceso de agua puede ser contraproducente.

sustrato

El naranjo también necesita  un sustrato rico en nutrientes para su buen crecimiento. Para ello, puedes conseguir un sustrato elaborado a base de algas o guano de murciélago, entre otros. 

dañino

Los naranjos son árboles resistentes pero susceptibles a cierto tipo de plagas como  las cochinillas, la mosca blanca y la araña roja  . Se recomienda prevenir este tipo de insectos antes de tener que tratarlo  y para ello puedes elaborar insecticidas caseros y naturales con ajo, agua, clavo y canela para rociar sus hojas y sus ramas y evitar que se acerquen a él.