Jabones de glicerina caseros, excelente receta de como transformar aceite y alcohol en jabones de glicerina. Muy eficaz y de gran calidad para blanquear ropa, entre otras cosas.
Es una combinación de ingredientes que tenemos en casa:
Ingredientes
- 4 litros de sebo o grasa derretida
- 3 litros de aceite de cocina usado
- 4 litros de Alcohol (etanol sin aditivos)
- 1kg de Soda Cáustica en escamas (diluida en 3 litros de agua)
- 1kg Azúcar (diluido en 1 litro de agua)
- 80 gramos de bicarbonato de sodio en 150 ml. de agua
- 1 litro de detergente neutro (transparente)
Procedimiento, paso a paso
- Para empezar, en una cubeta echamos 4 litros de alcohol, el aceite de cocina usado y el sebo derretido, mientras vamos removiendo todo. La recomendación es colar previamente el aceite usado, al menos 2 veces en un colador para mantenerlo bien limpio, recuerda la segunda vez agregando un paño limpio sobre el colador.
- Siguiente paso, añadimos la sosa cáustica disuelta en 3 litros de agua. Pero se sugiere disolverlo media hora antes de iniciar la preparación, de esta manera lo tendremos listo al momento de agregarlo al jabón.
- Luego, disolvemos el bicarbonato en agua y reservamos. Hacemos lo mismo con el kilo de azúcar disuelto en 1 litro de agua hasta que se disuelva por completo y reservamos.
- Seguimos con el procedimiento, es momento de agregar la sosa cáustica poco a poco y con cuidado, siempre removiendo con medidas de seguridad.
- Mientras hacemos esto observaremos que el jabón comienza a hacer espuma, incluso notaremos que el color del jabón cambia y se vuelve más intenso como el de la Coca-Cola.
- Siguiente paso, llega el momento de agregar la glicerina, nos referimos al azúcar diluido en agua que tenemos reservado. Cuando lo integremos veremos como cambia de color, seguimos removiendo y dejamos reposar un minuto para luego continuar hasta potenciar la receta.
- A continuación, añadimos el litro de detergente transparente (puede ser de marca barata). Lo vamos añadiendo poco a poco mientras mezclamos hasta conseguir una textura homogénea.
- Para terminar, añadimos el bicarbonato y removemos hasta conseguir una mezcla bien disuelta y uniforme.
- Finalmente ya tenemos el jabón listo, solo queda elegir el molde o las formas donde verterlo para dejarlo toda la noche. La recomendación es de 12 a 14 horas hasta que seque y así poder cortarlo.
- Como último punto, al verter el jabón en el molde, vamos a pulverizar el alcohol para reducir la espuma blanca. Al día siguiente simplemente lo sacamos del molde, lo cortamos y listo.