Cómo hacer florecer las orquídeas, que se encuentran entre las flores más queridas, pero también entre las más difíciles de cultivar: algunos trucos pueden ayudar a que florezcan maravillosamente.
Un hogar, así como un lugar de trabajo y un estudio profesional, se muestran mucho mejor si sus interiores se caracterizan por flores y plantas , que animan y realzan todo el apartamento. Los amantes de la jardinería nunca dejan de enriquecer las paredes donde viven o trabajan con plantas y flores que dan tono a todo el ambiente.
Entre las flores más queridas y solicitadas se encuentran sin duda las orquídeas , que se distinguen por cierta delicadeza, pero también por su originalidad y colorido. Las orquídeas dan un toque único y decorativo a los hogares, pero al mismo tiempo son flores difíciles de cultivar, mantener y conservar. ¿Cómo, entonces, mantenerlos vivos el mayor tiempo posible y hacerlos florecer todo el año?
Hacer que las orquídeas florezcan en todo su esplendor: este método te sorprenderá
Las orquídeas, que se aclimatan fácilmente a un ambiente interior, tienen necesidades específicas. Se requiere un mantenimiento regular y un cuidado especial para asegurar cierta conservación de estas flores. En primer lugar, para favorecer la floración de las orquídeas es necesario regar tus plantas con regularidad, ya que la tierra húmeda prolonga el periodo y duración de la floración. Las orquídeas deben regarse una vez por semana en los meses de primavera y verano, mientras que en invierno un máximo de una vez cada dos semanas.
También es fundamental que las orquídeas reciban la cantidad adecuada de luz solar, teniendo cuidado de no exponerlas demasiado: su tolerancia a la luz solar directa es muy baja. Como todas las plantas, las orquídeas también tienen unas necesidades específicas: si se respetan, conseguiremos que estas plantas duren mucho tiempo.
Fertilizante casero
Alguien opta por confiar en los fertilizantes , pero estas soluciones suelen estar compuestas por sustancias químicas que a la larga pueden ser tóxicas no solo para las flores, sino también para la salud de quienes viven en la casa. Por eso el consejo es hacer un abono ‘casero’.
Para permitir que las orquídeas florezcan de la mejor manera posible, es esencial fertilizarlas con mucha regularidad. Algunas sustancias, como el potasio, el hierro, el silicio y el fósforo , ayudan a dar una gran mano a las orquídeas para que crezcan bien. Todos estos elementos están contenidos en un solo ingrediente, a saber, el agua de arroz.
El primer paso es añadir el equivalente a 10 gramos de arroz en un litro de agua caliente, luego dejar macerar durante una hora. Pasado este tiempo, se debe escurrir el arroz, filtrar el agua y dejar enfriar . Posteriormente, el líquido resultante se vierte en una botella, para luego proceder al riego de las orquídeas. El consejo es utilizar esta mezcla una vez cada cuatro riegos: al cabo de varios días empezarás a notar un claro cambio de ritmo en la floración de las orquídeas.
Cómo regar orquídeas con sal de epsom
Otro truco muy eficaz para cultivar y conservar las orquídeas es utilizar epsomita, también conocida como sal de epsom. Este mineral en particular ayuda a nutrir la tierra de la maceta, para que la orquídea no solo pueda crecer más rápido, sino que también florezca maravillosamente.
Compuesta por sulfato de magnesio hidratado, la sal de epsom permite a las plantas asimilar mejor los nutrientes esenciales , incluidos el nitrógeno y el fósforo, para estimular la floración. Además, la epsomita permite la formación de clorofila, que es esencial para la fotosíntesis. Todo lo que tienes que hacer es agregar una cucharadita de sal a un litro de agua , luego verter la mezcla sobre las plantas. La operación debe repetirse una vez por semana.