Limpiar los suelos es sin duda una de las tareas más laboriosas de la casa. Requiere tiempo y muchos cuidados, pero ¿qué satisfacción es tener unos suelos bien limpios, limpios y relucientes? ¡Suelos antiadherentes y antideslizantes! Sin embargo, muchas veces, a pesar de todos nuestros esfuerzos, seguimos viendo que quedan manchas antiestéticas. También hay que decir que el suelo, ya sea de parquet o de mármol, tiende a almacenar mucho polvo y suciedad. A pesar de una cuidadosa limpieza, a veces tenemos la desagradable sensación de habernos agotado por nada.
Esta frustración es normal. Si la limpieza nunca es perfecta es por diversos motivos, entre ellos
los residuos de detergente o el uso de productos no adecuados para tu tipo de suelo. Muy a menudo, si las manchas o los residuos de agua no se eliminan inmediatamente, existe el riesgo de que la mancha no desaparezca.
Pero tenga la seguridad de que existen muchas formas naturales de conseguir un suelo brillante y sin rayas. ¡Mira estos pocos trucos caseros que cambiarán el juego!
NB: Recuerde que es muy importante comprobar el tipo de suelo antes de limpiarlo, siguiendo siempre las instrucciones proporcionadas por el fabricante.
El piso
El parquet de madera nos permite tener un interior cálido, acogedor y confortable.
Sin embargo, es un suelo muy delicado que hay que tratar con mucho cuidado.
Para limpiarlo bien, basta con disolver 2 cucharadas de bicarbonato de sodio y 1 trozo de jabón de Marsella en un balde de agua de 3 litros. Disolver todo bien y lavar.
También puedes utilizar un trapeador de microfibra húmedo para eliminar el polvo y la suciedad. Si quieres aportar un aroma fresco y agradable, añade unas gotas de aceite esencial al perfume que prefieras.
Lo importante es que el paño esté bien escurrido, porque la madera absorbe agua y debe secarse rápidamente.
Nota : la combinación de bicarbonato y jabón de Marsella es ideal ya que estos dos ingredientes 100% naturales y biodegradables son conocidos por sus propiedades limpiadoras, quitamanchas y desengrasantes.
Para pulir
La cera de abejas se puede utilizar para quitar manchas y pulir suelos de parquet, siempre que sea natural y no contenga aditivos químicos. También puedes utilizar unas gotas de aceite de oliva, que nutre profundamente la madera y le aportará más brillo y brillo.
Otro método casero: el uso de bolsitas de té. ¡Sus sabores y beneficios para la salud sólo rivalizan con sus atractivas propiedades para pulir nuestros pisos! Simplemente coloque 2/3 bolsitas de té en un recipiente con agua o en un balde pequeño, vierta el líquido en la tierra, déjelo por unos minutos y seque.
Pisos de marmol
Los suelos de mármol aportan un toque de frescura y elegancia a tu hogar. Sin embargo, esta piedra noble y resistente debe manipularse con mucha delicadeza. ¡Para evitar dañar este material, es necesario multiplicar las precauciones!
Debes evitar absolutamente ciertos productos naturales que podrían corroerlo o empañarlo. Hablamos principalmente de vinagre. Aunque es especialmente eficaz para la limpieza doméstica, no se recomienda en absoluto su uso sobre superficies o suelos de mármol. Este compuesto natural tiene propiedades antical y detergentes, ideal para elaborar suavizante o detergente, tanto para lavadora como para lavavajillas. Pero es muy probable que dañe el mármol, como lejía u otros productos que contengan sustancias desincrustantes.
Limpieza diaria
Por tanto, es necesario actuar con la mayor delicadeza posible para evitar marcas en los suelos de mármol. Aquí tienes un detergente para preparar:
- 1 cucharada de jabón de Marsella (en versión líquida)
- 3 cucharadas de bicarbonato de sodio
- 3 litros de agua
Disolver todos los ingredientes en el balde de agua. El jabón de Marsella tiene una acción desengrasante pero muy delicada, eliminará delicadamente la grasa y la suciedad. No olvides secar bien la superficie limpia.
Pulido
Puedes pulir el mármol de diferentes formas para que no queden rayas.
Un método muy sencillo es disolver 3 cucharadas de bicarbonato de sodio en 3 litros de agua y utilizar un paño de microfibra. Prueba nuevamente este truco de la abuela usando un suéter viejo de lana que te ayudará a fregar mejor la zona sucia.
También puedes comprar polvo de piedra pómez muy fino en las tiendas de mejoras para el hogar. Simplemente disuelva 2 cucharadas en 2 litros de agua y aplique suavemente. Luego puedes enjuagar con una solución de agua combinada con unas gotas de jabón líquido. Atención, enjuagar sólo con agua tibia.
Suelos cerámicos o de gres porcelánico
Los suelos de cerámica y gres porcelánico son muy apreciados, ya que son compactos y resistentes. En este caso es mejor no utilizar detergentes aceitosos para evitar la aparición de rayas. Si quieres pulir tu piso, puedes preparar una mezcla de agua caliente con medio vaso de vinagre blanco. Este último te resultará de gran utilidad, ya que tiene múltiples propiedades desengrasantes y abrillantadoras. Además, ¡es un excelente ambientador! Esto te permitirá eliminar posibles marcas o restos de grasa. Si lo deseas, también puedes agregar unas gotas de tu aceite esencial favorito para llenar el espacio con un aroma dulce y fragante.
Limpieza diaria
Para la limpieza diaria necesitarás:
- 1 cucharada de jabón de Marsella en virutas o líquido
- 3 litros de agua
- 4 cucharadas de vinagre
Si el suelo está demasiado brillante y puede resultar resbaladizo, aumenta ligeramente la cantidad de alcohol y sustituye el vinagre por 2 cucharadas de bicarbonato de sodio.
Nota
No olvides que es necesario asegurarte del tipo de suelo antes de limpiarlo, sobre todo teniendo en cuenta las instrucciones del fabricante.