Cultivar espárragos: aquí tienes la guía completa para hacerlo en casa

Los espárragos son una verdura deliciosa y versátil que se puede cultivar fácilmente en casa, aunque requiere un poco de paciencia. El cultivo de espárragos requiere una atención específica, pero una vez que aprendas los trucos adecuados, podrás disfrutar de una deliciosa cosecha de espárragos frescos y sabrosos.


Aquí tienes la guía completa para cultivar espárragos en casa.

Para empezar a cultivar espárragos en casa, debes seleccionar tu variedad favorita, en función de tus necesidades y posibilidades de cultivo. Una vez elegida la variedad, se puede iniciar el cultivo a partir de semilla o de patas, según preferencias y disponibilidad de suelo. Si decides partir de semilla es recomendable seleccionar cuidadosamente la variedad que mejor se adapte al suelo. Cultivar espárragos en casa no requiere esfuerzos especiales, gracias a su fácil adaptabilidad a diferentes tipos de clima. Una vez seleccionada la variedad y iniciado el cultivo, es importante prestar atención a algunas precauciones. Los espárragos, por ejemplo, requieren una buena exposición al sol y un suelo bien drenado y rico en sustancia orgánica. Además, es importante mantener el suelo constantemente húmedo, evitando el estancamiento del agua, y proteger las plantas de parásitos o enfermedades. Cultivar espárragos lleva tiempo, ya que el ciclo de crecimiento de la planta es bastante largo. Sin embargo, con un poco de paciencia y dedicación es posible conseguir una buena cosecha.

Instrucciones y consejos útiles para obtener excelentes resultados.

La ubicación ideal para la maceta de espárragos es en una zona de la casa soleada, bien iluminada, alejada del exceso de humedad y con buena ventilación. Esta es una consideración importante entre los consejos para cultivar espárragos, pero la elección del suelo es igualmente crucial. El suelo arenoso y bien drenado es el más adecuado para cultivar espárragos en interiores y requiere una excavación profunda y fertilización con estiércol o estiércol antes de que comience el crecimiento. La siembra debe realizarse en primavera y las semillas deben enterrarse justo debajo de la superficie del suelo, a unos 15 mm. Si puedes, distribuye las semillas en hileras paralelas a una distancia de 40 cm entre sí.



El cultivo de espárragos requiere mucho espacio, incluso solo para la producción destinada al consumo doméstico, por lo que los macizos de flores deberían ocupar varios metros cuadrados de tu casa. Riega tu cultivo 2 o 3 veces por semana y las primeras plántulas deberían aparecer entre 25 y 30 días después de la siembra. Después de un par de meses, las plántulas habrán crecido lo suficiente como para poder aclararlas para trasplantarlas en otoño. Después de unos meses de espera y trasplante a suelo seco, estará listo para cosechar espárragos sanos y fuertes, generalmente entre marzo y junio, cuando alcanzan una longitud de 8 a 10 cm.