Cultivo de mango en casa: ¡una guía fácil y rápida!
Las frutas tropicales se han convertido en un elemento habitual en nuestras mesas, fácilmente disponibles en los supermercados. Si bien el delicioso sabor es subjetivo, la belleza estética de estas plantas a menudo pasa desapercibida. Muchas plantas tropicales, además de producir frutos ricos en vitaminas, cuentan con una apariencia impresionante. Para crear un rincón único en casa, considere cultivar una planta de mango a partir de una simple fruta; es sorprendentemente fácil.
Materiales necesitados:
- Un cuchillo muy afilado
- Un par de hojas de papel secante
- Un poco de agua
- Un recipiente de plástico transparente
- Película transparente
Obtención de la semilla de mango:
Cuando preparamos un mango para comer, normalmente pasamos por alto la semilla. Sin embargo, cuando se pretende cultivar una planta de mango, es fundamental manipular la semilla con cuidado.
- Si el fruto está muy maduro, realizar una incisión en todo el perímetro sin tocar el hueso. Gire las dos mitades para liberar la semilla.
- Si la pulpa está más firme, hacer rodajas evitando el contacto con el hueso, soltándolo poco a poco.
- Extrae la semilla teniendo cuidado de no dañarla. Suele haber una hendidura en la parte externa; Comenzamos desde allí para abrir y extraer la pulpa interna intacta.
Tratamiento de la semilla para el crecimiento de las plantas:
Una vez que tengas la semilla de mango, envuélvela suavemente en un par de hojas de papel absorbente. Colócalo dentro de un recipiente y humedece toda la toalla de papel con agua, asegurándote de que esté bien empapada pero no saturada.
Envuelve el recipiente con film transparente, creando un mini invernadero que mantiene las condiciones óptimas de temperatura y humedad para la semilla. Coloque el recipiente en un área bien iluminada, evitando la luz solar directa. En aproximadamente diez días, serás testigo de cómo emergen los primeros brotes de tu hermosa planta de mango. ¡Disfruta del proceso de cultivar esta belleza tropical en casa!