Estamos acostumbrados a utilizarlo en la cocina, pero ¿alguna vez has probado a utilizar orégano en los pies? Esto es lo que sucede.
Muy a menudo los ingredientes que utilizamos en la cocina resultan ser aliados válidos también para el cuidado de nuestro cuerpo. Es el caso del orégano, uno de los remedios menos conocidos pero excelente para los pies. Veamos por qué y cómo usarlo.
Las propiedades del orégano
Planta aromática de origen mediterráneo utilizada principalmente en la cocina, el orégano también tiene numerosos usos en el ámbito médico . En la época de los antiguos egipcios y la antigua Grecia, era visto como un símbolo de paz y felicidad, por lo que era muy utilizado en las bodas para adornar a los novios.
Su principal característica es sin duda el aroma, que persiste incluso después del secado.
La parte más utilizada del arbusto son las hojas, conocidas también por sus propiedades digestivas, que se utilizan tanto en el ámbito curativo como para la producción de aceites esenciales cosméticos y médicos. Pero ¿cuáles son sus propiedades para el cuidado personal? Existe una excelente forma de utilizar el orégano en el sector de la belleza , basta con utilizarlo como rutina semanal en tus pies para eliminar los malos olores y mantener alejados posibles hongos y bacterias. Veamos cómo usarlo.
Orégano en los pies: ¿cuáles son los beneficios?
Quienes cuidan su cuerpo con rutinas específicas ya conocerán el uso del orégano. Como ya hemos comentado, su acción, ayudada por la de otros ingredientes, ayudará a mantener alejados de tus pies cualquier hongo o bacteria.
La solución es muy sencilla de utilizar y los ingredientes se pueden conseguir fácilmente en casa.
El ingrediente principal evidentemente es el orégano, que debe ir acompañado de agua, vinagre de vino blanco y bicarbonato de sodio .
El procedimiento consiste en colocar cinco cucharadas de orégano en polvo en una olla. Es preferible el en polvo, pero si lo tienes en trozos también está bien, igual sirve. Después del orégano hay que agregar una taza y media de agua, pasar la olla al fuego y llevar todo a ebullición, revolviendo de vez en cuando . Una vez que la mezcla empiece a hervir, apaga el fuego y espera a que se enfríe.
Cuando la solución haya alcanzado la temperatura ambiente y ya no esté caliente, viértela en otro recipiente usando un colador para eliminar restos y grumos y luego agrega una taza de vinagre de vino blanco. El vinagre será un excelente aliado en esta solución, pues sus propiedades ayudarán aún más a la eliminación de bacterias y hongos.
En otro recipiente, vierte 5 cucharadas de bicarbonato de sodio : otro ingrediente muy importante conocido por sus propiedades blanqueantes y antisépticas. También es un excelente exfoliante, ideal para los pies cuando llega el frío.
Ha llegado el momento de poner los pies en un recipiente vacío y verter la mezcla con el orégano . Luego, vierte bicarbonato de sodio y remoja tus pies durante cinco a diez minutos. Pasado este tiempo, saca los pies y déjalos secar al aire durante otros 5/10 minutos.
Para combatir el mal olor de pies y mantener alejados los hongos y bacterias, puedes repetir esta rutina un par de veces por semana . Tus pies te lo agradecerán.