Además de su vertiente estética y decorativa, las plantas de interior tienen beneficios para la salud y el bienestar. Purificantes y descontaminantes, limpian el aire de tu hogar y al mismo tiempo reducen el estrés. Además, algunas plantas no necesitan sol para crecer y son ideales para un interior que no necesita mucha luz.
Para vestir tu dormitorio o salón, las plantas de interior son el objeto decorativo perfecto, sobre todo porque son fáciles de mantener y no requieren muchos cuidados. Tantas razones para no privarse de estas plantas que nos desean lo mejor. Además de su cualidad depurativa, también tienen un impacto psicológico y social y no es casualidad que los espacios profesionales cada vez se equipen con más plantas.
Algunas de ellas pueden prosperar y crecer en interiores, incluso si no reciben mucha luz. En una oficina o a la sombra de tu salón, se adaptarán fácilmente a la luz existente sin necesidad de grandes cuidados. Sin embargo, puedes complementar su suministro solar con luz fluorescente y plantarlas en macetas lo suficientemente grandes como para que se establezcan sus raíces.
Aquí hay 10 plantas de interior que no necesitan sol para crecer
1. Planta serpiente (Sansevieria trifasciata)
Esta planta, que lleva el nombre de las rayas en forma de serpiente de sus hojas, es perfecta para personas que no tienen mucho tiempo para dedicar a sus plantas. Sin embargo, la exposición directa al sol o un riego demasiado frecuente podrían dañarlo .
2. Árbol de hoja perenne chino (Aglaonema)
Robusta, esta planta crecerá en tu interior incluso si no tienes buenas manos para la jardinería y alegrará tu interior. En una oficina o en el alféizar de una ventana , sin embargo, no dejes esta planta expuesta al sol, que podría quemar sus hojas .
3. Planta de oración (Maranta leuconeura)
Esta planta toma su nombre del hecho de que sus hojas se pliegan al caer la noche como si rezaran y se vuelven a abrir a la luz del día. Sus elegantes hojas ovaladas adornarán su interior para infundirle una atmósfera de paz y bienestar. Puede sobrevivir en la sombra y no tolera los rayos del sol, que pueden dañar sus hojas .
4. Bambú de la suerte (Dracaena sanderiana)
Al igual que el bambú, esta planta pertenece a la familia de las dracaena y se adapta a todos los espacios. Esta planta amante del agua debe regarse con regularidad y mantenerse alejada de la luz solar directa para sobrevivir .
5. Helecho culantrillo del sur (Adiantum capillusveneris)
Esta planta tiene la ventaja de crecer tanto en interior como en jardín, pero a la sombra. El sol puede quemar sus hojas y dañarlas, y requiere riego regular.
6. Palmera de salón (Chamaedorea elegans)
Refinada, esta pequeña planta con forma de palmera añadirá un toque de elegancia a su interior. Para que crezca sin problemas es importante mantenerla protegida de las corrientes de aire y del sol.
7. Planta de fundición (Aspidistra elatior)
Con sus grandes hojas de color verde oscuro, esta planta está lista para crecer en condiciones de poca luz y no requiere mucho riego ; también puedes limpiar las hojas para darles brillo.
8. Planta pavo real (Calathea makoyana)
Con sus hojas anchas y sus patrones distintivos, la planta del pavo real es decorativa y brillante. Requiere cuidados mínimos en condiciones de poca luz y no tolera la exposición al sol.
9. Helecho (Nephrolepsis exaltata)
Además de ser estéticamente agradable, el helecho mejora la calidad del aire y luce muy bien tanto en interiores como en exteriores. Sin embargo, requiere sombra para que sus hojas no se quemen con el sol. Para crecer, esta planta necesita riego regular.
10. Planta araña (Chlorophytum comosum)
Considerada la planta por excelencia para purificar el aire, alegrará tu interior eliminando los malos olores. Es una planta que se adapta tanto a la luz como a la sombra y requiere un riego regular.
Aprovecha los beneficios de las plantas y no dudes en decorar tu interior con ellas, tanto para purificar el aire como para ahuyentar a los insectos. Incluso hay plantas que traen suerte, energía positiva y prosperidad a tu hogar , así que ¡por qué privarte de ellas!