Sí, el té de remolacha se puede utilizar como fertilizante natural para alimentar a las plantas. La remolacha contiene muchos nutrientes beneficiosos para las plantas, como nitrógeno, fósforo, potasio, calcio y hierro.
A continuación te explicamos cómo preparar una infusión de remolacha para alimentar tus plantas:
- Ralla una o dos remolachas frescas en trozos finos.
- Coloca los trozos de remolacha rallada en un frasco de vidrio grande.
- Agrega agua hasta llenar el frasco, dejando aproximadamente de 2 a 3 centímetros de espacio libre.
- Cubre el frasco con una tapa o una hoja de papel de aluminio y colócalo en un lugar cálido y oscuro durante unas dos semanas. Revuelve la mezcla cada dos o tres días.
- Pasadas las dos semanas, filtrar la infusión de remolacha para retirar los trozos de remolacha rallada.
- Diluya el té de remolacha con agua (aproximadamente 1 parte de té por 10 partes de agua) antes de usarlo para regar sus plantas.
El té de remolacha se puede utilizar para regar todo tipo de plantas, especialmente aquellas que requieren nutrientes adicionales, como hortalizas y plantas con flores. Esta infusión puede ayudar a nutrir las plantas, estimular su crecimiento y fortalecer su resistencia a enfermedades y plagas.
Sin embargo, es importante no utilizar demasiada infusión de remolacha, ya que esto puede provocar que se acumule un exceso de sales en el suelo y dañe las plantas. Utiliza esta infusión con moderación y recuerda diluir la infusión con agua antes de utilizarla para regar tus plantas.