La limpieza no siempre es fácil. Simplemente limpiar, fregar y pulir un área no es suficiente para dejarla perfectamente limpia. Los olores juegan un papel esencial en tu relación con la limpieza. La ropa que sale de la máquina sin olor aún puede percibirse como sucia. Por el contrario, la ropa que huele a lavanda se percibe limpia aunque todavía tenga manchas. La gente prefiere oler la limpieza que verla.
Sin embargo, no hay nada peor que un olor a comida rancia o rancia que arruine tu vida. Después de limpiar a fondo tu hogar, ¿notas que queda un olor desagradable? Probablemente esto se deba a que una parte específica es responsable. Aquí tres lugares para combatir los malos olores
Consulta estos lugares si notas mal olor en tu interior
¿Alguna vez has abierto la puerta de tu casa y has olido un olor desagradable que ni siquiera los ambientadores más premiados pueden evitar?
No se apresure a ir a su armario con difusores de pachulí y aceites esenciales de lavanda. Algunos olores son difíciles de eliminar. Echan raíces en tus tejidos y membranas mucosas y deciden echar raíces allí. Primero, recuerda ventilar tu casa.
Hay tres lugares de tu hogar que pueden ser responsables de estos malos olores. Revísalos y elimina el olor antes de que se vuelva permanente.
- El desagüe del fregadero, cuando sale un olor, hace gemir la nariz.
Si el desagüe del fregadero huele desagradable, no significa que las tuberías estén obstruidas, sino que el olor que sale podría deberse a partículas de comida y grasa en el sifón. Estos restos de comida favorecen la proliferación de bacterias y moho.
Verter lejía u otro producto comercial no ayudaría mucho. Existe un truco de la abuela sencillo y eficaz para contrarrestar esta molestia provocada por los malos olores. Espolvorea el desagüe con ½ taza de bicarbonato de sodio, ½ taza de sal gruesa y 1 taza de vinagre. Déjalo reposar y luego vierte agua hirviendo para disolver todo. Los malos olores deberían desaparecer. Esta solución natural absorbe los olores y evita que entren en tu cocina y por tanto en tu hogar.
- ¿Un mal olor en tu alfombra?
Si tus pisos están cubiertos de alfombras, sabrás que éstas son definitivamente la fuente de los olores que se han instalado en toda la casa. Incluso después de lavar, fregar y secar la alfombra al sol, es difícil que algunos olores desaparezcan.
Para solucionar este problema, necesitarás el maquillaje de otra abuela. Espolvorea bicarbonato de sodio, nuestro ingrediente milagroso y perfecto aliado de limpieza, sobre la superficie de tu alfombra. Escanéelo para asegurarse de que esté distribuido uniformemente. Déjalo reposar unos treinta minutos y luego retira el bicarbonato de sodio con la aspiradora. Si no tienes aspiradora, una escoba servirá.
- Un mal olor puede ocultar otro. revisa tu basura
¿Tu bote de basura tiene un olor fuerte a pesar de usar una bolsa de plástico? Esto se debe a la mezcla de sus residuos. Las diferentes consistencias y olores se mezclan y forman un montón cuyo olor persistente te pondrá la piel de gallina.
Intente colocar algunas capas de periódico empapado en aceite de árbol de té en el fondo del bote de basura. El papel no sólo absorbe los líquidos que se escapan de la basura, sino que también evita que los olores entren en tu hogar.
Otro método es utilizar bicarbonato de sodio. Sin duda es, al igual que el vinagre blanco, el ingrediente principal de una familia ecológica, económica y eficiente. Espolvorea un poco de bicarbonato de sodio en el fondo del bote de basura antes de colocar la bolsa de plástico dentro. Verás que pronto se notará el efecto del bicarbonato de sodio. También puedes agregar a la basura unas gotas de aceites esenciales del aroma de tu elección, como vainilla, menta, limón o eucalipto, para enmascarar y enmascarar los olores desagradables, como haría un difusor estándar. Si no quieres utilizar aceites esenciales, tira algunas cáscaras de cítricos a la basura. Efecto refrescante garantizado.
El bicarbonato de sodio, de gran eficacia, es un limpiador versátil con innumerables beneficios para la salud y una buena alternativa a los productos químicos nocivos para el medio ambiente. Sin embargo, asegúrese de guardarlo bien, en un recipiente hermético que selle bien, y de guardarlo en un lugar fresco y seco para maximizar su vida útil. Recuerda también que otros ingredientes como los posos de café, el zumo de limón o el clavo ayudan a combatir el olor.