Las maravillosas propiedades de la verdolaga, cómo cosecharla y dónde encontrarla

La verdolaga es una planta que crece en casi toda Italia y ofrece decenas de beneficios para la salud. Conocida con varios nombres, entre ellos porcellana y porcacchia, su nombre científico es verdolaga oleracea .

Esta excelente planta terapéutica fue utilizada por nuestros antepasados ​​para prevenir y tratar numerosas afecciones de salud, como náuseas y fiebre. A continuación enumeramos las principales propiedades de la verdolaga .

Corazón

Esta planta es muy rica en omega-3, que son fundamentales para favorecer el buen funcionamiento del sistema cardiovascular, reducir el colesterol y favorecer la circulación sanguínea.

Diurético

El consumo de verdolaga facilita la producción de orina y la función renal en general. Gracias a esta propiedad nos permite expulsar residuos y elementos nocivos del organismo.

Antiinflamatorio

La composición de la planta, rica en mucílagos, también tiene efectos antiinflamatorios y puede ayudar a aliviar la inflamación provocada por infecciones.

Antiséptico y antifúngico.

La verdolaga ayuda a bloquear el crecimiento de algunas bacterias, aumentando las defensas. También se puede utilizar para luchar contra hongos y parásitos.

Diabetes

Secondo recenti studi, la portulaca potrebbe ridurre i livelli di glicemia nel sangue, essendo un vegetale molto benefico per chi soffre di diabete.

Anemia

Vitamine, minerali e amminoacidi della portulaca possono contribuire a migliorare i sintomi dell’anemia.

Antiossidante

La portulaca contiene composti come la betalaina, con proprietà antiossidanti capaci di ridurre i danni cellulari e a contrastare gli effetti dei radicali liberi.

Come riconoscere e usare la portulaca

La portulaca è una pianta spontanea e, come tale, va saputa riconoscere. La portulaca si presenta come una pianta strisciante, dalle foglie carnose e lisce e i fusti rossicci.

Questa pianta può essere consumata cruda, da sola oppure in insalata. Si consiglia di scegliere i rametti più giovani, in quanto più teneri e gustosi. Il fusto va evitato: sebbene commestibile, è troppo duro e un sapore meno gradevole.

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