El cactus de Navidad, también conocido como cactus de Pascua (Schlumbergera bridgessii), es una espectacular planta de interior que florece en invierno y añade una explosión de color a casi cualquier espacio interior. Esta popular planta no sólo es fácil de cuidar, sino que también se puede propagar fácilmente. Si sigue unos sencillos consejos, podrá garantizar una floración continua y vibrante durante todo el año.
Propagar flores durante todo el año: La propagación de cactus navideños implica cortar un pequeño segmento en forma de “Y” de los extremos de los tallos, asegurándose de tomarlo de una parte sana de la planta.
Plantar el segmento cortado: Plante el segmento cortado introduciéndolo aproximadamente un cuarto de su longitud en un suelo ligeramente arenoso. Asegure una humedad uniforme del suelo y colóquelo en un área bien iluminada, evitando la luz solar directa.
Generación de raíces para plantas nuevas: Para estimular el crecimiento de raíces para plantas nuevas, corte los brotes de los extremos en la segunda articulación de cada planta. Después de unas semanas, una vez que aparezcan signos de crecimiento, transfiérelo a otra maceta con una mezcla de tierra, abono y arena.
Cuidado del cactus navideño para promover la floración: aunque el cactus navideño no es quisquilloso, algunos ajustes menores pueden garantizar una floración abundante y saludable.
Condiciones óptimas de iluminación: Adaptable a poca luz, colocar el cactus en ambientes más luminosos fomenta la aparición de más flores. Protéjalo de la luz solar directa para evitar quemaduras en las hojas; busque un rincón bien iluminado y protegido para un crecimiento óptimo.
Riego crucial: el riego abundante y regular es fundamental en primavera y verano para mantener la tierra constantemente húmeda sin empaparla. Riegue con frecuencia pero permita que la tierra se seque ligeramente entre cada riego; el exceso de agua puede provocar la pudrición de las raíces.
Preferencias de temperatura y humedad: Mantenga las temperaturas entre 15°C y 21°C para un crecimiento óptimo. Lo mejor es una humedad moderada; Colocar una bandeja con guijarros llena de agua debajo de la maceta puede mejorar los niveles de humedad.
Ciclo de inactividad posterior a la floración: después de las flores de otoño, permita que la planta entre en su ciclo de inactividad reduciendo la frecuencia de riego y la exposición a la luz. Asegúrate de que la planta reciba de 12 a 14 horas de oscuridad, con temperaturas entre 10°C y 12°C, alejada de fuentes de calor y corrientes de aire.
Si sigue estas sencillas pautas, su cactus navideño puede sorprenderlo con ciclos de floración frecuentes e inesperados, creando un despliegue de belleza festiva durante todo el año.