Los antibióticos han demostrado su eficacia en jóvenes y mayores, pero como cualquier medicamento, suponen importantes riesgos para la salud. ¿Sabías que puedes hacer tu propio antibiótico natural? En este artículo te contamos los secretos de dos ingredientes que están presentes en todos los hogares y que pueden tener el mismo efecto potente que un antibiótico sin efectos secundarios.
Los antibióticos son medicamentos eficaces que se utilizan para tratar infecciones causadas por gérmenes (ciertos parásitos y bacterias). Estos medicamentos no funcionan contra enfermedades causadas por virus, como la gripe o el resfriado, ni por hongos, como las infecciones cutáneas por hongos. Para evitar los peligros de tomar antibióticos, existen dos alimentos naturales sumamente poderosos: la cúrcuma y la miel.
Cúrcuma y miel, ¡una mezcla que no tiene precio!
Los beneficios de la cúrcuma:
Sin duda una de las especias más populares en todo el mundo, la cúrcuma tiene propiedades culinarias y medicinales excepcionales. Se ha utilizado en la medicina ayurvédica, india y china durante miles de años. Esta especia tiene un sabor único y un color amarillo oscuro. Se utiliza como un poderoso remedio natural para una variedad de problemas de salud, como problemas respiratorios, enfermedades hepáticas, problemas de la piel, esguinces musculares, cortes y heridas y problemas estomacales. Además, puede resultar de gran ayuda para problemas digestivos, diversos tipos de infecciones, inflamaciones, así como tumores malignos.