El bicarbonato de sodio es el nuevo producto doméstico de moda. Económico y ecológico, resulta sumamente eficaz para la limpieza de la casa. Gracias a sus propiedades desodorizantes, desengrasantes y quitamanchas, puede sustituir a muchos detergentes químicos. Pero ojo, sin embargo, no está exento de peligros y no debe utilizarse en todas las superficies. Averigüemos cuáles.
En los últimos años el bicarbonato está por todas partes. Polvo para hacer de todo, sus cualidades están bien establecidas. Pero no olvidemos que también es un abrasivo y puede provocar daños si se utiliza incorrectamente. A continuación se ofrecen algunos valiosos consejos de uso.
5 cosas que no debes limpiar con bicarbonato de sodio
En la cocina, en el baño, en el jardín, para lavar la ropa, no puedes prescindir de él. El bicarbonato de sodio es nuestro aliado en la limpieza, al igual que el vinagre blanco y el limón. Permite limpiar, desengrasar y desodorizar todo de forma natural. Pero ojo, cuál es su fuerza, también puede tener consecuencias… De hecho, su lado abrasivo, que te permitirá limpiar, blanquear, también puede dañar algunas superficies, veamos cuáles:
1- Mármol y cuarzo : si tienes suelos o encimeras fabricados con estos materiales naturales, evita limpiarlos con bicarbonato de sodio corriendo el riesgo de dañarlos y empañarlos. El lado abrasivo de este polvo ataca los minerales y los daña. Prefiere un producto específico adecuado para esta superficie.
2- Vidrio : material frágil, podría rayarse y perder brillo y brillo.
3- Cubiertos viejos : si se suele recomendar pulir la plata con bicarbonato de sodio, hay que tener cuidado al tratar con objetos viejos. Su lado abrasivo podría atacar la pátina y empañarla. Lo mejor es buscar asesoramiento profesional antes de dañar piezas hermosas.
4- Placas vitrocerámicas : el bicarbonato de sodio no es nada adecuado para el mantenimiento de superficies vitrocerámicas. Se nubla, ataca y provoca un velo blanco muy difícil de quitar.
5- Esmalte dental : gracias a sus cualidades, el bicarbonato de sodio puede ayudarte a limpiar la boca y desincrustar los dientes. Sin embargo, no se debe abusar de él y hacerlo de forma ocasional y nunca a diario con el riesgo de dañar el esmalte dental. El lado abrasivo del polvo puede atacar y erosionar el esmalte y las encías, y cualquier deterioro es irreversible.
Diferenciar claramente entre los 3 bicarbonatos de sodio
Producto natural, mezcla de piedra caliza y sal, al bicarbonato se le llama “soda” por un abuso del lenguaje cuando en realidad es bicarbonato “sódico”. De hecho, no tiene nada que ver con la sosa cáustica, que es un producto corrosivo y peligroso.
Sin embargo, existen tres tipos de bicarbonato , que no están destinados a los mismos usos. Es importante diferenciarlos claramente para su correcto uso.
1- Bicarbonato farmacéutico o medicinal : es el más puro y está destinado al cuidado de la piel y al tratamiento de trastornos digestivos como el dolor de estómago. Está hecho para ser ingerido y no presenta riesgos para la salud. Sin embargo, no abusar de él y no exceder los 10 g por día. Busque siempre el consejo de su médico.
2- Bicarbonato alimentario : generalmente lo encuentras en la sección de sal del supermercado, puedes ponerlo en tu repostería para sustituir la levadura o en tus preparaciones para airearlas. También puede eliminar la acidez de algunos ingredientes como los tomates o ablandar la carne.
3- Bicarbonato técnico : menos puro, es menos costoso y está destinado a trabajos del hogar, bricolaje o jardinería. Sobre todo, no lo ingieras ni lo apliques sobre tu piel o cabello.
Entonces, aunque el bicarbonato de sodio es natural y no representa ningún peligro real, es necesario usarlo de manera consciente para evitar algunos inconvenientes y efectos secundarios no deseados.