Planta ajos ecológicos frescos sin gastar nada durante todo el año

Consigue ajo fresco y ecológico sin gastar dinero durante todo el año. ¡Aprende a plantarlo y ahorra!

El ajo es un alimento muy utilizado en diversas culturas culinarias. Además, debido a sus numerosos beneficios para la salud, se utiliza en varios medicamentos y hierbas. Si quieres saber cómo plantar ajos, debes saber que es muy fácil.

Con estos consejos podrás aprovechar todas las vitaminas, minerales y otros nutrientes que te ofrecen los alimentos. Por no hablar de los deliciosos platos que puedes preparar sin gastar demasiado.

Cultivar esta planta en casa puede resultar muy útil, ya que puedes garantizar un producto libre de pesticidas y completamente orgánico. ¡Y no solo! Es posible plantar en espacios reducidos, incluso en apartamentos pequeños con poca luz solar.

Comprar una maceta grande
El primer paso para plantar ajo es elegir los recipientes en los que crecerá la verdura. Recuerda que cada diente de ajo hay que plantarlo por separado. Para que la planta crezca libremente, la maceta debe tener una profundidad mínima de 30 cm.

También puedes empezar a plantar en un recipiente más pequeño, pero al cabo de unos días tendrás que trasplantar el bulbo a un recipiente más grande.

Elegir una buena ubicación
Como muchas plantas, al ajo también le encanta el sol. Coloca las macetas en zonas de la casa donde le dé el sol la mayor parte del día. Evite las zonas de sombra, porque le encanta la luz directa y preferiblemente en un ambiente aireado. Por ejemplo, una ventana o un porche.

La planta necesita más sol por la mañana, es decir, temprano en la mañana. Por lo tanto, puedes colocar el jarrón en la ventana durante unos minutos cada día y luego moverlo.

¿Dónde encontrar semillas?
Para conseguir la mejor planta, también necesitas una buena semilla. Busque los dientes de cabezas de ajo grandes y frescas. Cuanto más grande y sano sea el diente, mejor será el ajo que se cosechará.

Sí, planta el diente de ajo en la misma tierra. Si lo prefieres, puedes dejar que los ajos germinen primero y luego meterlos en la tierra. Es una buena idea, porque da mayores garantías de éxito para la siembra.

¿Cómo se cultiva el ajo de esta forma? Es muy sencillo: compra una cabeza y déjala en la cocina cerca del sol. También puedes ponerlo en un vaso de agua. La hidroponía ayuda a que el ajo crezca. En unos días aparecerán hojas verdes entre tus dientes. Se parece al cebollino. Si está en agua, las raíces del bulbo también crecerán.

Ahora es el momento de aterrizar. Simplemente cava un hoyo de unos cinco centímetros y llena completamente el bulbo con tierra fresca.

Realizar una buena siembra
El suelo también marcará una gran diferencia. Lo mejor es utilizar tierra para macetas previamente fertilizada, que se puede encontrar en centros de jardinería o en algunos supermercados.

Debe estar húmedo al momento de plantar. Si esto lo haces con un diente de ajo sin brotes, recuerda que el diente de ajo debe colocarse en posición vertical con la punta más fina hacia arriba. Vuelve a colocar tierra a su alrededor, recordando que la punta debe quedar expuesta para que pueda brotar.

Regar con moderación
Aparte del período de hidrocultivo, el ajo no requiere mucha agua. Para evitar mojar la planta, riega cada 10 días o cuando notes que la tierra está muy seca. En verano o si la planta recibe luz solar todos los días, riega cada dos días.

Puede crecer
Tenga en cuenta que después de un tiempo aparecerá y crecerá un tallo verde. Para que el ajo crezca correctamente es necesario podar este tallo siempre que supere los 10 cm. Mucha gente no hace esto y luego se queja de que la planta muere.

Aunque los ajos aún no estén listos para ser recolectados, aprovecha esta poda para utilizar las hojas en la ensalada, porque quedan muy ricas.

Recuerda que la aparición de cualquier otra planta en tu maceta debe ser una señal de alarma. Retírelo inmediatamente para no dañar la salud del bulbo plantado.

cosecha
Cuando las hojas más viejas de la planta comienzan a secarse y ponerse amarillas, el ajo ya se puede cosechar. Es necesario arrancar la planta para que la cabeza de ajo abandone toda la tierra.

El período entre la siembra y la maduración puede tardar hasta tres meses para que la planta esté lista para el consumo.

Cómo plantar ajo en una botella para mascotas

Además de ayudar a mantener aún más comida chatarra fuera de la naturaleza, reutilizar la botella para mascotas es una decisión económica, ya que es excelente para cultivar ajo en interiores.

Todo lo que necesitas es una botella grande de agua de 5 litros, tierra para macetas, un lápiz óptico y unos dientes de ajo.

A continuación te explicamos cómo hacerlo, paso a paso y el resultado:

Cómo germinar ajo en agua.

Es posible germinar el ajo directamente en agua sin tener que enterrarlo.

Para ello, simplemente coloca la base de unos dientes de ajo, aún sin pelar, en un vaso con medio centímetro de agua y cambia el agua todos los días durante una semana.

Después de siete días tendrás tus brotes enraizados, listos para plantar.

Sencillo, ¿verdad? Y puedes ponerlos en un jarrón decorativo o en un babero.

¿Cuánto tiempo tarda el ajo en crecer?

Para enraizar y estar disponible para plantar, una semana es suficiente. Sin embargo, la recolección de las hojas -similares a las del cebollino, pero con un sabor más intenso- tarda 20 días.

Para que nazca una nueva cabeza de ajo habrá que esperar un poco más, unos tres meses. Pero vale la pena esperar, ¿no estás de acuerdo?

Consejos útiles sobre cómo plantar ajo.

El ajo es una planta que necesita poco trabajo. No necesita muchos cuidados para tener éxito. Un consejo importante es utilizar un jarrón con agujeros, para que el exceso de agua tenga suficiente infiltración. Esto evita que la bombilla se ahogue.

Si la planta se moja, no hay problema. Simplemente cambie la tierra de la maceta por una nueva y más seca. O no regar durante mucho tiempo. El ajo es bastante robusto y finalmente se recuperará rápidamente.

Cada tres meses, cuando tienes una nueva cabeza de ajo, le quitas un diente y lo vuelves a plantar en tierra nueva. ¡Así que mantén el rumbo y ahorra en este ingrediente!

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