Utilizados para secar los platos, secarse las manos o limpiar algunas superficies de la cocina, los paños de cocina se manchan rápidamente y se convierten en verdaderos nidos de gérmenes. Por suerte, existe un producto insospechado que te ayudará a limpiarlas y blanquearlas en poco tiempo. Te lo contamos todo.
Al limpiar los derrames de cocina u otros desechos, los paños de cocina se saturan rápidamente con rastros de aceite y grasa. Por eso, es recomendable utilizar varios paños de cocina en la cocina: uno para secarse las manos, otro para los platos y un tercero para limpiar la encimera de la cocina. Por tanto, se ensuciarán menos rápidamente.
¿Qué truco utilizar para quitar y blanquear el papel de cocina?
Existe una forma inesperada de limpiar los paños de cocina sucios. Es una alternativa eficaz al detergente normal que se puede utilizar durante un ciclo de lavado normal.
- Lavar los paños de cocina con pastillas para lavavajillas.
Pastillas para lavavajillas. Fuente: spm
Poner una pastilla para lavavajillas en tu lavadora puede ser una buena idea para limpiar tu electrodoméstico. Sin embargo, también puede tener una utilidad completamente diferente en cuanto al cuidado de la ropa. Es muy posible utilizarlo para limpiar paños de cocina sucios y manchados de grasa. Para ello, basta con sustituir el detergente habitual por una pastilla y poner en marcha la máquina. Sin embargo, se recomienda configurar el aparato en el programa Algodón a una temperatura de 90 grados para eliminar todas las bacterias. Tenga en cuenta que la tableta se puede colocar directamente dentro del tambor antes de comenzar el lavado. Si no quieres lavar los paños de cocina en la lavadora, remójalos en un recipiente con agua tibia y detergente para lavavajillas.
Otros consejos para limpiar y desinfectar el papel de cocina
Al igual que las pastillas para lavavajillas, se pueden utilizar otros medios para revitalizar los paños de cocina y restaurar su brillante blancura. Como regla general, se debe cambiar un paño de cocina cada 2 días. La frecuencia de limpieza depende en gran medida de la frecuencia de uso.
- Limpiar el paño de cocina con jabón de Marsella.
Jabón de Marsella. Fuente: spm
Para quitar las manchas de grasa de un paño de cocina puedes utilizar jabón de Marsella. Este producto natural y económico elimina eficazmente la suciedad de los tejidos. Simplemente moja la toalla y luego frota la zona manchada con este producto. Por tanto, es recomendable dejarlo actuar unos treinta minutos antes de volver a fregar y aclarar con agua limpia.
- Remoja los paños de cocina en agua caliente con bicarbonato de sodio.
Si el jabón de Marsella por sí solo no es suficiente, completa el lavado remojando el paño amarillento en una mezcla de agua caliente y bicarbonato de sodio. Este polvo blanco tendrá un efecto desengrasante y blanqueador sobre los tejidos a limpiar. Deje reposar la solución durante una hora antes de frotar a mano. Para un resultado impecable es posible completar el lavado en la lavadora.
- Lavar previamente los paños de cocina con una solución de cristales de soda.
Ceniza de soda. Fuente: spm
Si los paños de cocina están muy sucios, puedes sumergirlos en un recipiente con agua tibia mezclada con cristales de soda. Este producto, conocido por sus propiedades limpiadoras, blanqueadoras y desinfectantes, dará una segunda vida a los paños de cocina amarillentos y te ayudará a neutralizar los malos olores en los tejidos. Déjalas reposar una hora y luego frótalas con las manos antes de meterlas en la lavadora.
- Lavar los paños de cocina con agua oxigenada.
Este último consejo consiste en utilizar agua oxigenada para limpiar y blanquear la ropa de cocina. Simplemente vierta una cantidad igual de agua y peróxido de hidrógeno en el lavabo. Luego remoje la ropa y déjela durante unos 30 minutos antes de enjuagar.
Lavar trapos de cocina puede ser una verdadera tarea. El secreto está en prelavarlos con soluciones naturales y eficaces antes de meterlos en la lavadora . Para mantenerlos en su mejor estado, debe asegurarse de mantener su cocina limpia para que no acumulen olores ni humedad y secarlos bien entre usos.