El romero es una de las plantas aromáticas más apreciadas, y siempre es conveniente tener una planta a mano, en la cocina, para poder utilizar sus ramas en nuestras recetas.
El romero produce hojas muy aromáticas , que se utilizan en la cocina, pero también para ahuyentar ciertos tipos de insectos, como los mosquitos, de la casa. Además, es muy fácil de cultivar, incluso sin un pulgar verde . Esto se debe a que es muy resistente, y mantenerlo vivo es realmente un juego de niños ¿Por qué no reproducirlo para tener abundancia?
El método de corte es el más utilizado. En este artículo descubriremos cómo no fallar en este truco , agilizando además los tiempos de crecimiento.
El esqueje para reproducir el romero
Multiplicar la planta de romero no es una operación nada complicada, todo lo contrario. Y esta época del año, la primavera, es el momento perfecto para hacerlo. A pesar de esto, hay algunas reglas básicas que deben respetarse para tener éxito.
Comencemos diciendo que sería mejor elegir el método de corte, porque la reproducción de semillas lleva mucho más tiempo: unos 3 años. Con esquejes, solo uno. Para facilitar aún más el procedimiento, seguimos el método de corte en el suelo, evitando la primera brotación en agua.
Esto es lo que necesitamos:
- una cazuela de barro (es la mejor elección);
- suelo universal y turba para hacerlo más drenado y suave;
- hormona de enraizamiento, también natural,
- ramita de romero , de hasta 15 centímetros de largo.
Lo primero que hay que hacer es limpiar la rama quitando las agujas de la base unos 6 centímetros. Cortamos la base de forma oblicua, para que la rama quede un poco más puntiaguda y recortamos la parte superior 1 centímetro.
Luego sumergimos la base en una hormona de enraizamiento , incluso 100% natural (como la canela). El corte ya está listo para los otros pasos.
El truco rapidísimo para reproducir el romero
Llegados a este punto puedes pensar que basta con enterrar la base de la ramita, pero hay un truco que no se debe subestimar para ayudar a la multiplicación del romero. Este es un truco de cultivadores . Solo necesitamos una patata muy común, en la que clavar la ramita de romero incluso antes de enterrarla.
El tubérculo favorece un crecimiento inmediato de las raíces, haciéndolas desarrollarse más robustas y vigorosas. No en vano la patata está repleta de vitaminas y sales minerales.
Sin embargo, es importante elegir un tubérculo crudo y sano, es decir, sin partes podridas. Creamos un agujero de unos 3 centímetros de profundidad e insertamos la rama oblicuamente desde el lado cortado. Después podemos enterrar la patata y la ramita en el florero, obviamente dejando que emerja del suelo.
Por último, colocamos nuestro esqueje en un rincón luminoso y cálido, y lo regamos regularmente, sin dejar secar nunca la tierra. Sin embargo, evitemos los huecos.