Sembrando y cultivando rúcula, ¡una ensalada llena de especias!

Para darle un poco de picante a tus ensaladas, no dudes en sembrar un poco de rúcula. Fácil de cultivar, disfrutarás de las hojas, cocidas o crudas, ¡pero también de las flores!

1 – ¿CUÁNDO SEMBRAR RÚCULA?

La rúcula (Eruca sativa) es una planta anual que se siembra durante las estaciones intermedias, es decir primavera y otoño, porque no tolera muy bien el calor del verano, lo que la hace dura y amarga.

La siembra de rúcula perenne (Diplotaxis ericoides) se realiza al mismo tiempo, sabiendo que será preferible poner las semillas en el suelo en primavera para que haya enraizado bien cuando llegue el frío invernal. Si casi desaparece esta temporada, reaparecerá en cuanto regrese la primavera.

El tiempo de germinación es de sólo unos días. Como la rúcula es muy resistente en cualquier clima y transcurren entre 40 y 45 días entre la siembra y la primera cosecha, la siembra de primavera puede realizarse ya en marzo; los de otoño se podrán lanzar en septiembre.

No planee cultivar otra cosa en lugar de rúcula después de la primera cosecha porque generalmente podrá hacer 2 cortes nuevamente antes de que se convierta en semilla, es decir, antes del verano o el invierno, según la temporada de crecimiento. Sin embargo, rara vez se corta toda la hilera de una vez; las hojas y las flores se cosechan según sea necesario.

Ojo, la rúcula es muy fácil de cultivar siempre que no le falte humedad y que no le afecte la falta de riego o el calor extremo en un lugar soleado en pleno verano.

La rúcula aprecia los suelos frescos, fértiles y bien aireados, que habrán contado con un aporte normal de estiércol antes de la siembra.

Para los amantes del calendario lunar, es mejor sembrar rúcula durante la luna menguante y creciente.

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