En el mundo de la alimentación existen alimentos que, además de aportarnos nutrientes y la cantidad adecuada de aminoácidos, vitaminas y sales minerales, también tienen diferentes funciones que no esperábamos.
Por ello, algunos de estos productos, al ser completamente naturales, también son útiles con fines cosméticos y se pueden encontrar en productos indicados para el bienestar físico de nuestra piel.
Orquídeas: aquí está el ingrediente secreto para unas flores exuberantes
De hecho, determinados alimentos, particularmente frutas y verduras, contienen propiedades que suelen ayudarnos a prevenir el envejecimiento de la piel o relajarnos, como es el caso del uso del pepino.
Pero estos alimentos no sólo son útiles para el ser humano sino que pueden ser auténticos aliados para el crecimiento de determinadas plantas, tendiendo a dar lugar a flores exuberantes y abundantes si se utilizan.
De hecho, en nuestros hogares casi todos tenemos plantas para decorar nuestras habitaciones y balcones, pero muchas veces no logramos cultivarlas de manera efectiva y tiramos la toalla.
Por lo general, aquellos que no tienen habilidad para la jardinería o no tienen mucho tiempo para cuidar una planta tienden a comprar o regalar plantas suculentas porque requieren menos tiempo para cuidarlas.
Son muy útiles porque retienen la humedad en las plantas y también se dice que algunos de ellos atraen y reducen la radiación de los equipos electrónicos.
Por eso, desde mediados de los años 2000, también empezaron a venderse en los supermercados las diminutas suculentas que la mayoría de los jóvenes suelen tener en sus ordenadores.
Cómo proceder
Pero una de las plantas más queridas de todos los tiempos son las orquídeas las cuales suelen tener flores amadas por todos, aunque se pueden encontrar en el mercado en diferentes especies dependiendo de tu gusto.
Considerada una de las plantas más elegantes de todos los tiempos, las orquídeas tienen hojas cerosas y flores hermosas y hay un ingrediente que, cuando se usa, puede hacer que estas flores sean aún más exuberantes.
De hecho, sólo hay que coger una col rizada y tras quitarle las hojas sobrantes la cortamos en dos partes e introducimos la mitad en una batidora y picamos todo en trozos muy pequeños.
Luego mezclamos todo con agua y con un colador recogeremos el jugo y veremos como obtenemos un líquido verdoso que será rico en vitaminas sobre todo las del grupo B.
De esta forma, nuestras orquídeas se alimentarán de estas sustancias y tenderán a crecer con arbustos y hojas fuertes y con flores cada vez más espléndidas y abundantes, despertando la envidia de nuestro vecino.
Para proceder, simplemente vierte una taza de líquido de col directamente en la tierra y un poco sobre las raíces y hojas y al cabo de unos días empezarás a ver los primeros efectos.