Si tiene espacio limitado pero tiene un fuerte deseo de cultivar su propia lechuga fresca y crujiente en casa, entonces este artículo es para usted. Le mostraremos cómo crear un jardín de lechugas único y que ahorre espacio utilizando bolsas de plástico que se pueden colgar fácilmente donde desee. Con este enfoque innovador de la jardinería, podrás disfrutar de lechuga casera sin necesidad de un huerto tradicional ni de grandes recipientes.
¿ Por qué cultivar lechuga en bolsas de plástico colgantes ?
Ahorro de espacio: Las bolsas de plástico son excelentes recipientes para la lechuga, ya que ocupan poco espacio, lo que las hace ideales para pequeños balcones, patios o incluso dentro de la cocina.
Movilidad: Puedes mover estos jardines colgantes según sea necesario para seguir la luz del sol o redecorar tu espacio.
Control de plagas: Colgar bolsas puede ayudar a reducir el riesgo de plagas y enfermedades que a menudo afectan los jardines terrestres.
Accesibilidad: Tener lechuga a mano te animará a incorporar
Más verduras frescas en tus comidas diarias.
Ahora, profundicemos en los pasos para crear su propio jardín de lechugas colgantes:
Materiales necesitados:
Bolsas de plástico con asas Mezcla para macetas o abono Semillas o plantas de lechuga Tijeras Regadera o rociador Ganchos o rejillas (para colgar bolsas) Fertilizante (opcional)
Paso 1: elija las bolsas de plástico adecuadas
Seleccione bolsas de plástico resistentes con asas, preferiblemente de un color claro para evitar el sobrecalentamiento. Asegúrese de que tengan orificios de drenaje adecuados para evitar el encharcamiento del suelo.
Paso 2: prepara las bolsas
Con las tijeras, corte con cuidado pequeños orificios de drenaje cerca del fondo de cada bolsa de plástico. Estos agujeros evitarán el exceso de agua y la pudrición de las raíces.
Paso 3: llenar las bolsas
Llene las bolsas de plástico con la mezcla para macetas o abono, dejando aproximadamente una pulgada de espacio en la parte superior. Esto permitirá un riego adecuado sin desbordes.
Paso 4: sembrar semillas o plantas de lechuga
Siembre semillas o plantas de lechuga de manera uniforme en la superficie del suelo. Siga el espacio recomendado para la variedad específica de lechuga que esté cultivando, generalmente a una distancia de entre 15 y 20 centímetros.
Paso 5: Riega y Cuídate
Riegue la tierra suave pero abundantemente después de sembrar. Mantenga la tierra constantemente húmeda, pero no empapada, durante la temporada de crecimiento. Usar una regadera o un rociador ayuda a prevenir el exceso de agua.
Paso 6: cuelga las bolsas
Cuelgue las bolsas de plástico preparadas en un lugar que reciba una exposición solar adecuada. La lechuga prospera en sombra parcial pero requiere al menos de 4 a 6 horas de sol por día.
Paso 7: mantener y cosechar
Controle su jardín de lechugas colgantes con regularidad para detectar signos de crecimiento y riegue según sea necesario. También puedes aplicar un fertilizante líquido equilibrado cada pocas semanas para estimular un crecimiento saludable.
Coseche las hojas exteriores de la lechuga cuando alcancen el tamaño adecuado. Este método de “corte y cosecha continuos” permite disfrutar de una cosecha continua durante toda la temporada.
En conclusión :
Cultivar lechuga en casa en bolsas de plástico colgantes ofrece una solución conveniente que ahorra espacio para quienes tienen espacio limitado en el jardín. Si sigue estos sencillos pasos y aprovecha los beneficios de la jardinería vertical, podrá disfrutar de lechuga casera fresca al alcance de su mano. Ya sea que tenga un pequeño balcón, un patio pequeño o simplemente desee agregar un poco de vegetación a su cocina, este jardín colgante de lechuga hecho por usted mismo es una adición encantadora a cualquier proyecto de jardinería urbana.