Si bien trasplantar una rosa puede parecer una tarea reservada a los profesionales, lo cierto es que cualquiera puede completar con éxito este proceso con unos sencillos pasos, especialmente cuando se trata de combinar diferentes variedades.
Elección del portainjerto: Es fundamental elegir un portainjerto adecuado para el proceso de injerto. Los viveristas experimentados recomiendan utilizar una rosa mosqueta como patrón, combinada con una rosa multiflora, especialmente para principiantes. La rosa mosqueta tiene raíces robustas y se adapta bien a diversos tipos de suelo, lo que la convierte en un portainjerto ideal. Las rosas multiflora tienen raíces poco profundas, perfectamente adaptadas a este tipo de injertos.
Preparación del portainjerto: Obtenga el portainjerto plantando semillas de ambas variedades o creando esquejes. Durante el invierno, tome dos ramas de unos veinte centímetros de largo. Plante estas ramas en verano para hacer crecer su portainjerto.
Herramientas y requisitos: antes de comenzar con el injerto, reúna las herramientas necesarias, incluidas tijeras desinfectadas y materiales de ligadura. Asegúrese de que la temperatura exterior sea de unos 25 grados centígrados para obtener condiciones óptimas.
Proceso de trasplante:
- Realizar un corte perpendicular sobre el corte seleccionado, procurando que no quede demasiado afilado.
- Retire las hojas y espinas del esqueje para una mayor practicabilidad.
- Adjunte la parte desprendida al portainjerto.
- Asegure la conexión con rafia u otros materiales ligeros, cubriendo el corte realizado anteriormente.
Monitoreo y Mantenimiento:
- Después de un mes, retire la ligadura para inspeccionar el estado de las raíces.
- En febrero, realice la operación más crítica cortando el portainjerto en la unión del injerto.
- Durante la primavera, controle el crecimiento y, cuando el brote alcance los quince centímetros, podelo.
- Elimine cualquier crecimiento salvaje alrededor de la estructura.
Consulte a un profesional: consulte siempre a un viverista profesional, ya que no todas las variedades de rosas son aptas para operaciones de injerto.
Si sigue estos pasos y permanece atento al desarrollo del rosal injertado, podrá completar con éxito el proceso de injerto y disfrutar de la belleza única de su rosal personalizado.