Mantener las alfombras constantemente limpias puede ser un desafío. Migas, pelos de animales, marcas de zapatos… Se ponen a prueba cada día. Por eso necesitan un mantenimiento regular para prolongar su vida útil. Gracias a los métodos probados que sugerimos, podrás darles un lavado de cara y mejorar su vida útil.
Las fibras de la alfombra eventualmente se desgastan debido al polvo y la suciedad. Esto les da un aspecto apagado y por eso es importante pensar en soluciones adecuadas como parte de una limpieza profunda. Con estos consejos acaba con la suciedad rebelde y deja paso a alfombras y moquetas llenas de vida.
Aspirar la alfombra – Fuente: spm
¿Cómo limpiar las alfombras para que luzcan nuevas por mucho tiempo?
La limpieza de alfombras puede resultar tediosa y llevar mucho tiempo, pero es una tarea necesaria. Para limpiarlo correctamente te sugerimos que hagas de estos productos ecológicos tus aliados:
- Limpiar la alfombra con la combinación de vinagre blanco y sal.
El vinagre blanco combinado con sal es una mezcla eficaz contra la suciedad. Para aprovechar las propiedades limpiadoras de estos dos ingredientes y facilitar el trabajo, recomendamos aplicarlos mediante un atomizador. Para ello prepara 250 ml de vinagre, 2 cucharadas de sal y ½ litro de agua tibia para verter en un atomizador. Mezcle y luego rocíe la solución uniformemente sobre la alfombra. Déjelo reposar durante la noche y luego aspire al día siguiente.
- Quitar las manchas de la alfombra con bicarbonato de sodio.
Polvo de bicarbonato de sodio – Fuente: spm
El bicarbonato de sodio es un producto multiusos probado que se puede utilizar para eliminar manchas de alfombras y moquetas. Tiene fama de ser eficaz en diversas superficies del hogar y con razón ya que, en el caso concreto de las alfombras, puede facilitar la eliminación de las manchas. Para utilizarlo, extiéndelo con cuidado sobre la alfombra y déjalo actuar durante la noche. Al día siguiente aspírala y ya deberías haber aflojado la alfombra eliminando los olores que en ocasiones pueden emanar de ella. Cabe señalar que es necesario aspirar periódicamente, independientemente de la calidad de la limpieza. Dos veces por semana es un ritmo razonable.
- Usa la mezcla de bicarbonato de sodio y sal para revivir la alfombra.
Comience aspirando o barriendo la alfombra para eliminar la suciedad de la superficie y luego trate las manchas visibles . Luego verterás agua fría en una botella con atomizador y mezclarás bicarbonato de sodio y sal en paralelo en un recipiente pequeño.
Cubre generosamente el tapete con bicarbonato de sodio y sal, luego espolvorea un poco de agua. Si quieres simplificar el proceso, puedes comenzar por una esquina del tapete, limpiando el área hacia la salida. También tenga en cuenta que la alfombra debe estar húmeda pero no empapada.
Sal – Fuente: spm
Luego tendrás que presionar el bicarbonato de sodio y la sal más profundamente en las fibras con un cepillo. Ahora que has fregado el tapete, continúa con el paso final : limpiarlo suavemente con un paño. No es necesario forzar para retirar el poco bicarbonato que queda en las fibras.
Después de dejar que la alfombra se seque al aire, puedes aspirar para eliminar cualquier residuo de bicarbonato de sodio de la alfombra. Finalmente debería estar fresco, limpio y más radiante.
Las alfombras limpias cambian el aspecto de una habitación, y buenos consejos como estos ayudan a mantener su mejor aspecto durante mucho tiempo.